Ingresar al comercio electrónico con energía, ganas de emprender un nuevo negocio y emoción de ganar dinero son motivaciones básicas del comerciante. Por su parte, los compradores quieren adquirir productos novedosos, a bajo costo y también comodidad. ¿Qué pasa cuando esta estrategia está un poco gastada para ambas partes?
Suele pasar que ya tienes posicionada tu tienda online, así como tu marca y tus productos. Entonces te ves obligado a crear una nueva estrategia para mantener a tus clientes interesados en tu propuesta, y a la vez atraer a nuevas personas que se interesen en lo que les estas ofreciendo, tus productos y lo que les aportarás a su vida cotidiana. Es ahí en donde debes preguntarte ¿por qué vender solo productos, si se pueden vender emociones, momentos y experiencias?
Si consideras que ya tienes buena parte del mercado, entonces no dudes en poner en marcha una estrategia más romántica, intuitiva y que apele a las emociones de los clientes. A continuación algunos tips, expresados en 3 principales sentimientos, para que puedas sorprenderlos y mantenerlos dentro de tus clientes leales que apoyan a tu marca.
Satisfacción
No vendas un producto, vende un beneficio. Para iniciar una tienda, está bien que intentes por todas las maneras posibles vender el producto que con tanto anhelo tienes en exposición. En la etapa de mantenimiento, la estrategia puede cambiar un poco y ya no gritarle a los 4 vientos lo que quieres vender, si no lo que quieres que tus clientes obtengan al comprar ese producto, y no necesariamente debes decirles “cómpralo aquí”.
Pongamos un ejemplo. Estas vendiendo productos de belleza, y desde un inicio tu estrategia ha sido “cómpralo aquí ya que tenemos los mejores precios”. Es momento de apelar a las emociones y crear un discurso en donde lo único que demuestres es conocimiento del producto y de los beneficios que ofrece a corto plazo. Con esta simple acción, las miradas de tus clientes potenciales estarán en tu sitio, viendo lo que puedes hacer por ellos, y sin darte cuenta estarás vendiendo. Recuerda que uno de los puntos clave de la nueva mercadotecnia es satisfacción de las necesidades existentes o potenciales del cliente.
Sorpresa
Sin realizar una compra, regala un descuento. Sólo piensa en la cara de una persona al entrar a tu tienda online y ver que le estas regalando un cupón de $100 en su primera compra, con el único requisito de agregar su correo electrónico o un tweet en su cuenta. Sabemos que puede haber estrategias mucho más atractivas, pero esta es ir a lo seguro. Con el simple hecho de saber que se le va a regalar algo desde el inicio, el cliente ya se siente parte de tu tienda, y hasta cierto punto comprometido a gastar ese descuento.
A la vez, tu estas ganando la construcción de una base de datos que puede ayudarte en tu estrategia anexa de email marketing o social media, dependiendo del tipo de registro solicitado.
Si hablamos de clientes ya existentes, prueba esta estrategia como un plan de lealtad. Si vendes alimento para mascota, una buena estrategia sería que aquellos que ya tengan registrados seis bultos de alimento reciban uno gratis por su preferencia, con el ingreso automático a un programa de lealtad que seguirá brindándoles sorpresas inesperadas en alguna de sus siguientes compras.
Recompensa
Demuestra que tu cliente hizo algo bien. Que no se confunda este punto con el mencionado anteriormente. Recompensar a un cliente puede significar que gracias a que hizo algo por ti, tú vas a hacer algo por él. En esta estrategia, se puede incluir como inicio el punto 1 (satisfacción) y en el momento en el que el cliente realice algún comentario positivo, se le puede hacer llegar hasta sus manos algún tipo de presente (mascota de peluche, muestra del producto gratis, tarjetas de agradecimiento personalizadas, etc.) hasta la puerta de su casa, sin previo aviso. Aquí apelas al elemento sorpresa que estoy casi segura será algo que no olvidarán.
Juega un poco con estas promociones, ponte creativo y piensa que realmente los clientes no son entes con tarjetas de crédito que quieren gastar; son personas con necesidades que quieren satisfacer a través de las mejores opciones, a los mejores costos y siempre sintiéndose tomados en cuenta por esa marca en la que ellos confían.
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